Este bizcocho de calabaza es un placer para todos y es la adición perfecta para las próximas comidas y cenas de Navidad. Un bizcocho vegano, con harina integral y azúcar no refinado.

La fruta está llena de vitaminas, minerales, fibra y otros nutrientes beneficiosos, pero también contienen una cantidad considerable de azúcar. ¿Significa eso que deberíamos limitar la cantidad de fruta que comemos?

Estos pancakes de chocolate veganos son simplemente perfectos. Tiernos, jugosos, blanditos y ligeramente dulces. Si los quieres más dulces, simplemente añade un chorrito de sirope y listo. Estos pancakes son sin soja, sin nueces y bajos en grasa.

Sin gluten y sin lácteos, es el desayuno perfecto para cualquier día de la semana. Este porridge de arándanos y yogur es dulce, súper cremoso y puedes prepararlo con copos de arroz o de avena, ¡tú decides!

Perfecto para desayunar, comer o cenar. Estos boniatos rellenos veganos están riquísimos, son fáciles de hacer y súper nutritivos!

Una sopa de arroz salvaje calentita, saciante y mega-rica que hará que los días fríos de otoño/invierno sean más llevaderos. Además es súper nutritiva, rica en todos los aminoácidos, vitaminas B2, B3, B5, B6, A, K, E, C, folato y minerales como cobre, magnesio, manganeso, fósforo y zinc.

No importa si cocinas pasta, patatas, arroz, legumbres, verduras…un par de cucharadas de esta deliciosa salsa hará que el plato se convierta en brillante. Porque esta salsa de tahini mágica, hace justo eso con tus platos…MAGIA.

Deliciosamente dulces y ricos en varias vitaminas (grupo B, C, folato) y minerales como el zinc, selenio, cobre, fósforo, magnesio y hierro. ¡Estos pancakes de avena y fresas son simplemente el desayuno perfecto!

Fácil, rápido, sano e increíblemente rico. Este burrito bowl vegano es uno de mis platos preferidos y lo hacemos en casa al menos una vez a la semana. Estoy 100% segura de que también te va a encantar.

Esta salsa holandesa vegana está rica no, lo siguiente y además es muy fácil de preparar porque lo único que necesitas hacer es básicamente triturar todos los ingredientes y luego cocinarla en una cazuela durante unos minutos. Y aún siendo tan sencilla, sabe como las salsas holandesas de restaurante.